28 marzo, 2024

La ganadería eficiente necesita una sanidad de precisión

Una sanidad animal inteligente y que tenga impactos en los resultados productivos es posible, y para ello hay espacios de reflexión y análisis que buscan orientar al productor en este proceso de mejora. Uno de ellos es llevado adelante desde el laboratorio CDV, que mediante una convocatoria en la Sociedad Rural de Jesús María puso a la sanidad del rodeo en el centro de la escena.

El Laboratorio CDV busca generar espacios de reflexión (#CDVac48hs) acerca de la sanidad animal inteligente y su impacto productivo. Esta vez en la Sociedad Rural de Jesús María, junto al Lic. Víctor Tonelli como invitado para hablar de mercados, el responsable del Servicio Técnico de la firma, Nicolás Palacios se introdujo en la temática.

Primeramente el profesional trazó un recorrido de la empresa, que acumula 35 años de experiencia veterinaria en el diseño de biológicos para ganadería y piscicultura, con decenas de millones de dosis producidas.

“La sanidad animal está en el centro de la escena ganadera. Los animales sanos son más eficientes en la conversión de los alimentos en carne y leche, y tienen una mayor capacidad para resistir enfermedades y otros factores de estrés”, tiró y aseguró que la falta de atención a la sanidad animal tiene un impacto significativo en la productividad de los rodeos. Las enfermedades pueden reducir la tasa de crecimiento y producción de leche, así como aumentar la mortalidad y los costos de tratamiento. Los animales enfermos pueden transmitir enfermedades a las personas, provocando una zoonosis.

Diseñar una sanidad inteligente


El sendero de la sanidad en ganadería es un territorio que tiene mucho que ver con la eficiencia que reclama mejorar la competitividad. “Hacer sanidad inteligente es hacer prevención, para disminuir las pérdidas productivas a causa de las enfermedades y evitar altos gastos en tratamientos de las mismas”, precisa Palacios. Esta visión cobra aún mayor relevancia cuando diferentes variantes externas ofrecen escenarios poco favorables e impactan de manera directa en los indicadores de producción, tales fueron los casos de la sequía, la pandemia, y factores económicos.

Como en otras áreas de la producción ganadera, el especialista de CDV anuncia el ingreso a una era inteligente de la ganadería, corporizada en la actuación preventiva a partir del manejo de datos, de la información necesaria y a tiempo para tomar decisiones. “Es un trípode que integra a la nutrición, la genética y el manejo, reunidas todas en una ciencia de datos. El laboratorio de análisis es un aliado determinante de nuestro trabajo”, señala.

La cosa parece muy atinada: definir un antiparasitario para evitar generar resistencias, y lo mismo para precisar el antibiótico preciso en tiempos donde se busca reducir la aplicación de fármacos sin necesidad apuntada por los datos. Para ilustrar la cosa, Palacios tiró unos datos:

– El costo de una vacuna reproductiva en mayo/23 es de $218
– El precio de un ternero (160/180 kgs X $480) son $86.400
Esto significa que con un ternero se pueden vacunar 200 vientres a doble dosis.

La diarrea son desperdicios… de plata
Las pérdidas que producen la diarrea neonatal son importantes. Los costos asociados a un tratamiento preventivo van de 8 a 10kgs de ternero, unos $4.800.

La estrategia es prevenir vacunando las hembras preñadas en los dos últimos meses de gestación, y para apuntar la idea propone:
– Un kilo de ternero = 1,3 dosis de vacuna contra la diarrea neonatal
– Un ternero para las dosis dobles para 237 vientres
– Costo del tratamiento de un ternero = vacunar con doble dosis a 13 vientres

Y así, lo mismo con las enfermedades clostridiales y neumonías, que si no son tratadas a tiempo suelen tener un destino fatal.

Fuente.- https://www.todoagro.com.ar

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